¿Quién hace la crítica de las redes? ¿Quién habla de las infraestructuras de la redes? Se pregunta Geert Lovink, uno de los teóricos del internet contemporáneos más puntuales. A diario, millones de usuarios actualizan sus timelines, actualizan fotos, documentan su bienestar o malestar y lo comparten en sus redes sociales. Somos usuarios tentados a no abandonar nunca estos espacios, aunque en el fondo reneguemos de la lógica absorbente de dichas redes. ¿Qué necesitamos para librar esta batalla con la imperante necesidad de actualizarnos o declararnos activistas en la red en épocas de flujo perpetuo ? Esa misma red que también implica lógicas de vigilancia, mercado y control. Este libro reúne una serie de ensayos telúricos que nos lleva a pensar en el trabajo, la economía, las redes organizadas, los algoritmos, la vigilancia y la urgente necesidad de construir redes sostenibles para el intercambio de ideas y que no sean no únicamente espacios marcados por los intereses de unos cuantos.
Este artículo busca señales de discursos de odio aparecidos en comentarios sobre el procés y el independentismo catalán publicados en las noticias en prensa sobre Lionel Messi en Madrid y en Barcelona (Abc, La Vanguardia, Mundo Deportivo, Marca, El mundo y As) en el periodo 2019-2021. Partiendo de 2.639 noticias con Messi en el titular, se usaron métodos cuantitativos para identificar los hilos con comentarios políticos para estudiarlos después a través de análisis cualitativo del discurso. Los resultados reflejan que en Madrid se usan noticias y comentarios sobre Messi para hablar del procés y del independentismo, mientras que en Barcelona (tanto medios como comentaristas) no relacionan al jugador con la política. Dos periódicos de Barcelona (La Vanguardia, Mundo Deportivo) y dos de Madrid (Marca y El mundo) reúnen los 12 hilos con más comentarios políticos en ambas ciudades: 487, en total. Su análisis revela que la prensa deportiva concita opiniones más diversas que la generalista y, por tanto, recoge más conflicto y más presencia de discursos de odio por ideología política. Los primeros mensajes (1-25) en los hilos de comentarios aparecen un 77% de las veces como los más seguidos y, por lo tanto, los usuarios que escriben primero influyen más. Esta investigación concluye que los discursos de odio se detectan más en estructuras y argumentaciones que en palabras concretas, pero su existencia no tiene por qué ser negativa y puede derivar en un efecto búmeran contra el propio mensaje de odio si aparece derrotado en la dinámica de intervenciones.This paper examines hate speech traces within comments about the Catalan independentist procés embedded in news published about Lionel Messi in Madrid’s and Barcelona’s online newspapers (Abc, La Vanguardia, Mundo Deportivo, Marca, El mundo, As) during the period 2019-2021. Starting from 2,639 news with Messi in the title, quantitative techniques were applied to identify those with the highest volume of political terms, and their comments’ threads were later studied in depth by means of qualitative discourse analysis. The results show that in Madrid news and comments about Messi are leveraged to discuss the procés, while in Barcelona both press and commenters refrain from tying politics to the footballer. Two newspapers from Barcelona (La Vanguardia, Mundo Deportivo) and two from Madrid (Marca, El mundo) gather the 12 threads with the highest prevalence of political comments: 487 in total. Their analysis reveals that opinions in sports newspapers are more diverse than in the general press and, consequently, show more conflict and more hate messages linked to opposing political views. The few first (1-25) of the threads’ comments turn out to be the most followed 77% of the times, making the users who comment first become more influential than the latecomers. This research concludes that hate speech appears more in structures and argumentations than in specific words, but their presence isn’t necessarily negative and can create a boomerang effect against the hate message if this becomes defeated during the subsequent online dispute.